La Primera Comunión es una de las celebraciones más esperadas por las niñas y niños católicos de entre 7 y 12 años de edad, habitualmente. Para recibir la primera comunión es necesario que hayan recibido el bautismo y que hayan acudido a un curso de catequesis que puede durar uno o dos años, según el lugar donde vive el niño o niña. El curso es ofrecido por la iglesia pero también puede ofrecerlo el establecimiento, a través de encargadas de pastoral, como es el caso nuestro.

En el curso, los niños aprenden los valores y las normas de la iglesia, y además conocen las oraciones básicas como el Padrenuestro, el Ave María y el Credo. Concluido el curso, los niños recibirán el sacramento de la confesión o penitencia, y así estarán preparados para participar de la eucaristía, es decir, comulgar en misa.

Felicitamos a las niñas que pudieron hacer su primera comunión y transformarse así en testigos de fe.