Como cada año, los docentes varones de nuestro establecimiento, han encabezado el acto de conmemoración por el “Día internacional de la mujer”, ocasión en la cual, comparten un poco de historia acerca de todos aquellos acontecimientos que han llevado a declarar el 8 de Marzo, como un día de conmemoración más que de celebración.

Recordemos que un 8 de Marzo de 1857, en tiempos de la revolución industrial, un grupo de mujeres trabajadoras de una industria textil en la ciudad de Nueva York, organizaron una gran marcha como forma de protesta para pedir mejores condiciones laborales para todas las mujeres obreras, y acortar la brecha salarial entre hombres y mujeres, que en esos años eran menos de la mitad del sueldo del personal masculino de la fábrica.  En aquella ocasión, y luego de un disturbio con la policía de la época, 120 mujeres perdieron su vida clamando justicia y trabajo digno.  Este hecho histórico, sumado a otras manifestaciones por la igualdad de derechos laborales para las mujeres en lugares como París, Alemania y Rusia, llevaron a que en 1910, en la ciudad de Copenhague, se propusiera y aprobara la conmemoración del “Día de la mujer trabajadora”.

Debido a su origen y a todos aquellos eventos trágicos que llevaron a inmortalizar este día, esta efeméride se utiliza actualmente para recordar a las nuevas generaciones que es necesario visibilizar la desigualdad de género y buscar acciones que logren garantizar los derechos de la mujer en todo ámbito: Laboral, económico, educacional, entre otros.

Como colegio, nuestra misión es formar mujeres fuertes para el mundo del trabajo y no escatimamos esfuerzos en la búsqueda de aprendizajes significativos que permitan a nuestras estudiantes, ser mujeres integrales, valientes, que a través de una fe firme, servicio y acogida, logren dejar huellas a su paso, que transformen con dulzura y bondad la sociedad de mañana para construir un mundo mejor.

Con cariño sincero, estamos junto a ustedes, queridas estudiantes, nuestras valiosas mujeres.